Usted puede ser feliz
Una dictadura de cuarenta años no podía prescindir de la felicidad de sus protagonistas; ni siquiera de parte de sus potenciales antagonistas. La obviedad se olvida a menudo y algunos historiadores de la ficción tienden a subrayar la negrura de la época hasta lo caricaturesco. Ajustan así las cuentas con un pasado que rechazan. Mientras tanto, otros colegas, habitualmente más jóvenes y con tendencia al revisionismo para singularizar sus análisis, observan en la misma realidad brotes verdes, gracias a un optimismo digno de mejor causa. El equilibrio entre ambas posturas tal vez pase...