El rastro brillante del caracol

Los padres de Bertín Bracho querían que, de grande, su hijo fuera neurocirujano. Pero Bertín tenía otros planes. ¿Por qué no encantador de serpientes? Así que con el dinero que recibió al vender su regalo de cumpleaños, se fue a la tienda de mascotas a comprar una víbora pinta. Y, ¡tenía que ser!, escogió precisamente la única víbora mágica que había en la tienda.

Un día salí de la ducha y olvidé cerrar el grifo. Esa noche dormí a pierna suelta. Cuando amaneció, me llevé una sorpresa, pero decidí disimular... (Libro ganador del Premio de Álbum Infantil Ilustrado "Princesa de Éboli" en 2008 e incluido en la Lista de honor de la revista CLIJ en 2009)

"Blanquito, el pequeño oso polar, cree que ser de color blanco es aburrido y sueña con ser diferente. Esta entrañable historia cuenta cómo descubre que es maravilloso parecerse a los que más quiere. Las ilustraciones brillantes de este libro llamarán la atención de los más pequeños y convertirán este cuento en uno de sus favoritos"--Cover.

En la Tierra van todavía al colegio. Pero ahí afuera, en el universo, luchan contra el malvado conde Atrox y sus robotrox. ¡Por la verdad y la justicia..., y la luz de las estrellas! ¡Llamada de socorro desde Zafyra! En el planeta más frío de la galaxia ya esperan a los caballeros de las estrellas: horribles monstruos de hielo, mordaces bolas de pelo y un ser medio hombre, medio máquina: el siniestro conde Atrox...