Álvaro es gallego y Amelia alicantina, de Torrevieja. Se enamoran en Santiago de Compostela y se casan en la iglesia de Santiago, de Orihuela. Durante la luna de miel de la pareja, en un pazo de Lugo, la vieja Meiga atemoriza a la novia con sus malos augurios. Pasan los años y la amarga profecía se cumple cuando menos lo esperaban. La terrible enfermedad de Amelia somete a una terrible prueba a Álvaro. El Destino ha repartido sus cartas y cada personaje las va a jugar como mejor sabe, pero la Vida también entra en la partida y la Muerte se reserva la última baza. ¿Cuántas heridas...