Fairy Link. El secuestro de Piscis

Zoé, Liseta, Alex y Marc son cuatro inseparables amigos y juntos forman la banda de Zoé. Se verán inmersos en mil aventuras, viajarán a lo largo de todo el mundo y resolverán complicados misterios... ¡En este primer libro vuelan a París para investigar el robo de una obra de arte!

«Una historia nostálgica y especial.»Iryna Zubkova, @Ir_zu «Me ha hecho llorar incluso más que Boulevard.» Mirta, Goodreads Tessa Jacobs no ha conocido el amor. Fue abandonada por sus padres biológicos y su idas y venidas por casas de acogida solo empeoraron las cosas. Tessa no espera que nadie la quiera. Tampoco cree que lo merezca. Por eso, cuando conoce a Skylar, se resiste a dejarse llevar por la historia de amor que está creciendo entre ellos. No, no se merece esa clase de amor, la vida se lo ha dejado muy claro. Pero, poco a poco, él derribará los muros que Tessa se empeña en ...

Han pasado tres años desde el final de la guerra y la familia March se prepara para la boda de Meg con John. La mayor de las cuatro hermanas está a punto de alcanzar así su sueño de amor, mientras que Jo, dedicada en cuerpo y alma a la literatura, menosprecia los asuntos del corazón. La tímida Beth, por su parte, no se atreve a hablar con ningún chico y la pequeña Amy se ha convertido en una joven testaruda y encantadora. Pero el amor es solo una de las muchas sorpresas que el futuro reserva a las cuatro jóvenes: viajes, éxitos, nuevos proyectos, pero también dolores, pérdidas y...

¡Bienvenidos al show de Wild Boy, el chico salvaje! Señoras y señores, tomen asiento, el espectáculo está a punto de comenzar. Londrés, 1841. Wild Boy es un bicho raro con el cuerpo completamente cubierto de pelo a quién todos vienen a ver a la parada de monstruos del circo. Aunque, desde su cautiverio, él también mira a sus visitantes: es su única distracción. De hecho, el chico ha desarrollado unas técnicas de observación y deducción propias del mismísimo Sherlock Holmes. Así que, cuando es injustamente acusado de asesinato, Wild Boy se ve obligado a actuar. Por suerte, no...