Mi vida como pionero

Esta historia empieza una mañana de esas en que te aburres más que Spiderman en un descampado. Sabes de lo que te hablo, ¿verdad? Parece mentira que el día comenzara así... ¡y acabara con una de las aventuras más épicas de mi vida! Todo fue muy rápido: ver a ese desconocido entrar en su base secreta, colarme tras él sin ser visto... ¡e inventarme el reto de sobrevivir allí sin que me descubra! ¡A tope de pócimas de invisibilidad! ¡Venga escondites aquí y allá! En el momento me pareció divertido, pero nunca podría haber imaginado la montaña rusa de locuras que se me venía...

Alina acaba de recibir una en la que se le comunica que, junto a un joven desconocido, es la heredera de un codiciado diamante, por el que hay gente dispuesta a matar. Para evitar que esta joya caiga en manos indebidas, Alina se verá obligada a vivir una vertiginosa aventura contrarreloj en la que descubrirá que algunas personas son como cierta clase de diamantes: oscuros en la superficie, pero capaces de brillar en su interior.

"«A mi padre lo mataron una tarde que hacía mucho sol, aunque no lo supimos en ese momento. Él estaba del otro lado del mundo, en la selva oscura de Angola.» La infancia de Ernesto termina con esa noticia, a los doce años, un día que regresa de jugar en el bosque de La Habana. A los ojos de los demás se ha convertido en el hijo de un héroe enviado, como tantos otros cubanos, a la guerra de Angola. Bajo el peso de esa responsabilidad, Ernesto comenzará a percibir la contradictoria realidad de la Revolución y a indagar obsesivamente sobre el largo periodo de la presencia cubana en...

"Bienaventurados aquellos que profanan porque de ellos será el Reino de las Tinieblas. Bienaventurado aquel que repudia a dios porque de él serán los secretos del lado oscuro." No todo festival se desarrolla con ánimo festivo, ni toda blasfemia se pronuncia en vano. A esto viene el Festival de la blasfemia. Quien tenga las agallas para transitar esta historia inquietante, que tome este libro. Quien no tema las remembranzas de imágenes escamosas, que lea estas páginas. Quien se atreva a atesorar esta obra en su biblioteca, que no se pierda la opera prima de terror de Dross Rotzank.